HE ESPERADO DEMASIADO

Y he encontrado lo inesperado
...

Hoy papá ha llorado.
Cuando he llegado a casa me lo he encontrado llorando en el pasillo con el teléfono en la oreja y llorando…pero de felicidad (hace tanto que no lloro de felicidad que casi se me está olvidando esa agradable sensación).

El caso es que tras 43 años un compañero suyo de estudios (de estudios de seminario religioso nada más y nada menos), ha conseguido ponerse en contacto con el…ha sido muy emocionante para todos, y muy especial para papá. Creo que no solo le ha alegrado el día, sino mucho más, además nos ha alegrado también a los demás.

Después de esto papá ha empezado a contarnos cosas sobre su antiguo compañero, y batallitas de cuando él estudiaba. Yo sólo he escuchado, y con una leve sonrisa le he visto disfrutar de sus recuerdos durante largo rato. Papá siempre nos cuenta cosas de su pasado, supongo que para que aprendamos, pero hoy ha sido diferente. Se emocionaba mucho, y de vez en cuando cortaba la historia para no empezar a llorar, yo callado esperaba ansioso la siguiente frase. Se lo debía, hacía tiempo que no escuchaba a papá…y él sin embargo me ha escuchado tanto estos meses...aun lo sigue haciendo, creo en realidad que nunca ha dejado de hacerlo.

Después le he abrazado, y le he dado dos besos…le he dicho que esta noche me seguía contando. Él ha asentido con la cabeza.

Cuando he salido de casa he reflexionado sobre todo esto…y me he dado cuenta de que el tiempo pasa muy rápido, y que no se puede desperdiciar ni un segundo.

Yo no quiero perder ni un segundo más.
Ya he perdido muchos.